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El hospital desaparecido

Descubre el hospital desaparecido de la mano de Rutas con Historia y conocerás sus secretos, su Historia y donde se encuentran algunos elementos del hospital

¿Cuántos domingos has paseado por La Latina? ¿Cuántas veces te has ido a tomar algo con tus amigos por este barrio del centro de Madrid? Ya seas madrileño o turista, seguramente habrás estado más de una vez caminando por sus calles o sentado en alguna de sus terrazas o tabernas centenarias, pero sin tiempo de pensar siquiera en el origen del nombre de esta zona de la Villa y Corte. ¿De dónde viene el nombre de La Latina?

 

            Lo más probable es que el nombre provenga del antiguo Hospital de La Latina, que se encontraba en la confluencia de la calle Toledo con la Plaza de la Paja, y donde hoy están tanto estación de Metro como el Teatro del mismo nombre.

            Fue un hospital terminado en 1507, y recibió desde el principio el nombre de Hospital de la Latina porque sus fundadores y benefactores fueron Beatriz Galindo “la Latina” y su marido, Francisco Rodríguez: uno de los matrimonios más relevantes e influyentes de finales del siglo XV y principios del XVI.

          

Hospital de la Latina Hospital de la Latina

  Él fue secretario personal del rey Fernando el Católico, y se le conocía como “el Artillero” porque había servido como General de Artillería en la Conquista de Granada. Pero el miembro verdaderamente importante de la pareja fue ella. A Beatriz Galindo se la conocía como “la Latina” porque sabía leer y escribir en latín mejor que cualquier hombre de su época, y por eso fue elegida por Isabel la Católica como profesora de sus hijos. Desde luego, fue una de las mentes más brillantes de su época, y su influencia es tal que el Hospital que fundó, junto a su marido, en la calle Toledo, ha dejado su nombre al barrio aunque haya desaparecido.

            El edificio era de estilo gótico con influencias mudéjares, probablemente una de las arquitecturas más bellas que han existido en Madrid. Estuvo funcionando como hospital hasta el siglo XVII, y desde entonces fue un convento de monjas. Pero las transformaciones urbanísticas de principios del siglo XX lo consideraban un estorbo, y fue derribado.

            De él nos quedan fotografías en blanco y negro, e incluso una pequeña pintura de Joaquín Sorolla, que tuvo su primer estudio en Madrid en la vecina plaza de Tirso de Molina. Aun así, y aunque casi todos los madrileños lo desconocen, aún quedan tres elementos que se pudieron conservar: la portada, la escalera y los sepulcros del matrimonio.

            ¿Dónde están ahora? Aunque parezca mentira, siguen en Madrid. Y en la visita de La Latina y el Rastro de Rutas con Historia os contamos en qué lugares podéis verlos todavía. Hasta el castillo de La Mota de Medina del Campo tiene una réplica de estos elementos, ¡Cuántos secretos sigue escondiendo Madrid! Vente con nosotros a pasear con el barrio, y te los contamos todos...

Hospital de la Latina Hospital de la Latina