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¡Instala rutas con historia!
¿Sabías que existe una ruta en Madrid dedicada a un libro? El Juego de Pistas Luces de Bohemia. Se trata de un recorrido sobre la obra Luces de Bohemia, escrita por Ramón María del Valle-Inclán y publicada por primera vez en 1920. Con ella, el autor gallego inventó un nuevo género literario al que denominó “esperpento”, el cual trata sobre una deformación exagerada e irónica de la realidad social y política de la España de principios de siglo.
El Juego de Pistas Luces de Bohemia sigue los pasos de su protagonista, Max Estrella. Un escritor que no ha conseguido que se le reconozca su talento, y que pasea por un Madrid en el que se encuentra todo tipo de personajes y situaciones que sirven como base para sus críticas a la sociedad española.
En ese recorrido, el personaje pasa por sitios tan interesantes como Casa Ciriaco, donde se produjo el intento de asesinato del rey Alfonso XIII y su esposa en 1906, justo el día de su boda.
También se pasa por lugares que sirven de homenaje a grandes escritores de nuestro país. Un ejemplo es la casa en la que se suicidó Mariano José de Larra, alias “Fígaro”. Además, uno puede pararse a mirar las fachadas de las viviendas en las que nacieron, en el Siglo de Oro, tanto Calderón de la Barca, autor de “La Vida es Sueño”, como Félix Lope de Vega, el “Fénix de los Ingenios”.
En este itinerario destacan también los alrededores de la Puerta del Sol. Es bien conocido, por ejemplo, que la “Buñolería Modernista” en la que Max Estrella discute con unos jóvenes es la hoy famosísima Chocolatería de San Ginés. Y, precisamente por ese alboroto público, el protagonista de Luces de Bohemia acaba en el calabozo, situado en la Casa de Correos: ése edificio en el que se encuentra la Presidencia de la Comunidad de Madrid pero que es sobre todo célebre por su reloj y el sonido de sus “campanadas”.
Importantísimo es también el callejón del Gato, la que se dice que es la calle más estrecha de la capital y en la que se encuentran los espejos cóncavo y convexo que inspiraron a Valle-Inclán su esperpento. Además, en la vecina plaza de Santa Ana hay una escultura dedicada a Calderón, y está el Teatro Español, antiguo corral de comedias de la Villa y Corte. Por si esto fuera poco, las referencias de la ruta a los escritores no cesan. Paseando por la calle del Prado uno se topa con la escultura del Manco de Lepanto: Miguel de Cervantes.
Todo lo bueno acaba rápido, y en un descuido uno se encuentra con la última parada de este recorrido tan literario. Es el Círculo de Bellas Artes de la calle Alcalá, sede de la institución cultural homónima que ideó y organizó la ruta de Max Estrella por primera vez.
Con Rutas con Historia podrás sumergirte en esta ruta de manera interactiva y divertida ¡através de un Juego de Pistas Luces de Bohemia! Conoce esta recorrido que está esperándote en ese Madrid que hace cien años, como se presenta en la obra, era un Madrid “absurdo, brillante y hambriento”. Brillante, desde luego, sigue siendo
