Fuente de Diana Cazadora

La Fuente de Diana Cazadora también es conocida como la Fuente de la Cruz Verde, por encontrarse en la plaza del mismo nombre. La Plaza de la Cruz Verde toma su nombre de una cruz de madera pintada de verde que se colocaba como signo que indicaba los lugares donde se llevaban a cabo las ejecuciones por la Inquisición.

Se inauguro en el año 1850 por el entonces corregidor (alcalde) de Madrid Marques de Santa Cruz según se puede leer una lapida en la propia fuente. «Siendo correjidor el Excmo. Sr. Marqués de Sª Cruz. Año de 1850». Sobre la lapida se encuentra un escudo de Madrid.

El diseño de la fuente fue realizado por el arquitecto Martín López Aguado reutilizando la escultura de Diana y de los delfines procedentes de la Fuente de Puerta Cerrada que fue realizada en el siglo XVIII por los escultores Ludovico Turqui y Francisco del Valle. Está apoyada en la fachada del huerto del desaparecido convento de las Bernardas del Santísimo Sacramento.

Sobre su dintel descansa una estatua de Diana, diosa virgen de la caza y protectora de la naturaleza, vestida con túnica corta. Está realizada en mármol blanco, al igual que los dos delfines mitológicos situados a sus pies. El grupo escultórico se encuentra flanqueado por dos piñas ornamentales, de piedra blanca.

Consta de  cinco caños, tres de los cuales se encuentran en el cuerpo central. Sus aguas se depositan en un pilón de planta rectangular, construido en granito. La fuente es de diseño clásico y combina piedra blanca y granito con el modesto ladrillo.