- Actividades
- Periodo Histórico
- Comunidades
¡Instala rutas con historia!
Santa Maria de Bell-lloc es un monumento del municipio de Santa Coloma de Queralt, provincia de Tarragona.
La construcción de la iglesia hay que situarla en la primera mitad del siglo XIII, y su estructura refleja esta etapa de transición del románico al gótico, así como las ampliaciones posteriores que experimentó en época plenamente gótica y época barroca.
La iglesia fue construida en la primera mitad del siglo XIII. Y tiene su origen en una pequeña comunidad de dados, una agrupación laica de hombres y mujeres que previamente habían hecho entrega de sus bienes a la iglesia a cambio de acogida y manutención. Vestían hábito y estaban bajo la tutela de un mayoral nombrado por el rector de Santa Coloma. En 1307 el barón Pedro IV de Queralt hizo donación de la iglesia y residencia de los dados a la orden de la Merced, los mercedarios se instalaron allí definitivamente en 1335 y se quedaron hasta la desamortización de 1835, que el convento fue incendiado y quedó en pie solo la iglesia.
Originalmente era una ermita de una sola nave, de estilo románico tardío, probablemente de mediados del siglo XIII. Más tarde se cubrió la vuelta de crucería y durante el siglo XIV se añadió el crucero y la capilla de San Pedro, a la derecha de la entrada.
El interior del edificio muestra la austeridad propia del Cister. Consta de una nave dividida en dos tramos cubiertos con bóveda de crucería gótica, y un ábside de la planta cuadrangular. Junto al lado sur se abren dos capillas, la primera posiblemente del siglo XIV, tiene planta cuadrangular y corresponde al primer tramo de la nave. La segunda, de planta poligonal, es de época barroca y coincide con el segundo tramo. Una tercera capilla, también poligonal, se abre al lado norte.
Del interior cabe destacar también el magnífico sarcófago de alabastro de los condes de Queralt, Pere IV de Queralt y Alamanda de Rocabertí, realizado hacia 1360 por encargo de su hijo Dalmau de Queralt. El sepulcro se encuentra en el interior de la capilla del lado norte, y el hecho de que los capiteles y la clave aparezca la heráldica de los Queralt hace pensar que la construcción se hizo a sabiendas para contener el sarcófago.
Destaca también la imagen gótica de Santa María de Bell-Lloc tallada en madera.
En el exterior la magnífica portada es el elemento más destacado, que es la más importante del románico de esta región, hecha de piedra arenisca dificulta mucho su conservación.
La Portada está formada por un tímpano rodeada por un conjunto de arquivoltas de arco redondo que descansan sobre columnas y pilastras con capiteles. El arco exterior presenta una interesante decoración de inspiración oriental, con figuras de animales afrontados dentro de círculos enlazados de tipo vegetal. Las decoraciones figurativas, geométricas y vegetales estilizadas llenan columnas, capiteles, impostas y arquivoltas. Los rasgos estilísticos dominantes en la portada la relacionan con la llamada escuela leridana. Sin embargo, la iconografía del tímpano ya es gótica: se representan la Epifanía y la Asunción, a ambos lados de la Virgen con el Niño y San José.
Los capiteles muestran formas vegetales, escenas alegóricas y de la vida monástica y la única representación existente de la leyenda de Pedro II de Queralt (Corazón de Roble) liberado por los árabes después de luchar con un león y que algunos consideran el origen del león rampante del escudo de los Queralt. En el tímpano hay tres escenas: el centro, la Virgen coronada con el Niño Jesús, a la izquierda la Adoración de los Magos y a la derecha la Anunciación. Estas escenas se completan con dos representaciones en los dos extremos de la roca que muestran la representación de los tres magos al rey Herodes, (izquierda) y la huida a Egipto
Esta portada es el único elemento que decora la fachada principal, muy rehecha y que presenta un aspecto macizo, solo roto en la parte superior por una apertura de medio punto que hace la función de campanario.
El edificio fue incendiado en 1936 y en parte derribado.
En 1949 se inicio su restauración que duro hasta 1959. Eliminando todos los elementos que quedaban de las dependencias del antiguo convento, que no tenían interés artístico, y se conservo solo la iglesia, que hoy se encuentra bajo la advocación de la virgen de la Merced.
El conjunto fue declarado Monumento Histórico - Artístico en 1944.
