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El edificio del Ayuntamiento de Meira forma parte del primitivo monasterio cistercense fundado bajo las órdenes de San Bernardo en el siglo XII. Es el mayor atractivo de la ciudad construido bajo la influencia de la arquitectura de la órden cistercense. Meira es una zona de paso bañada por los ríos Miño y Eo y teniendo muy cerda la laguna de Fonmiña, donde nace el río Miño.
Esta Villa empezó a poblarse a raíz de la cesión realizada por el Rey Alfonso VII a los Condes de Sarriá. Se cree que sus fundadores fueron los artífices de que los monjes se asentaran en Meira y empezaran a repoblarlo. Empezó a enriquecerse debido a las donaciones recibidas durante diferentes periodos, entre ellas las del mismo Rey.
El edificio tiene planta de cruz latina, con las dos alas del claustro renacentista restauradas, ya que solo estaban las arcadas de su época primitiva, formando un ángulo con la iglesia monasterial de Santa María que pertenece al mismo conjunto, aunque es más de estilo románico, consagrada en 1258. Esta Iglesia solo conserva la fachada de sus orígenes.
El edificio situado en una gran plaza está realizado en sillería de granito cubierto con pizarra y consta de dos plantas. Con ventanales en las dos plantas y en la superior con balconadas rematadas con barandillas de forja. La austeridad en la estructura del edificio se ve claramente en la fachada principal con una puerta que mantiene la cerrajería primitiva. Esta tiene arco de medio punto y en la parte superior el escudo de armas de la Orden Cistercense de Castilla que da paso a un soportal con unos bonitos capiteles adornado con motivos florales. Desde el soportal se ve parte del claustro del siglo XVI que consta de planta baja y alta con columnas con zapatas. Del claustro solo se conserva un ala de la época primitiva.
Durante el año 1.515 tuvo sus mejores momentos, cuando el convento se unió a la Congregación de Castilla, teniendo entre sus muros la facultad de Filosofía, desgraciadamente en el año 1.835 después de varios años el convento entró en decadencia y se cerró.
Hoy en día es sede del Ayuntamiento de Meira y se encuentra situado en las dos alas del claustro. En 1931 fue declarado Monumento Nacional.