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La iglesia de Santa María está situada en el municipio de Cervera en la comarca de la Segarra, Lérida.
El templo de estilo gótico aunque de origen románico del que quedan algunos elementos importantes. La primeras noticia de la iglesia datan de mediados del siglo XI, ya que consta en una relación de parroquias del obispado de Vic. Coincidiendo con su fundación en el año 1081 fue cedida del priorato de San Pedro Gros al Monasterio de Ripoll.
Durante la baja Edad Media, gracias a la buena situación económica de la ciudad, se construyó sobre el antiguo edificio románico el actual de estilo gótico.
Al acercarnos a la iglesia vemos que su arquitectura exterior queda parcialmente oculta por el edificio de La Paeria. Por lo que hay que ir viéndola por partes, desde la calle Sebolleria se ve el ábside, muy desgastado por la erosión. Desde la plaza del fosar se aprecia perfectamente el Portal de San Martín, de estilo románico es lo más significativo que queda de sus origines, se trata de una imponente puerta esculpida bajo un porche gótico y cuyo nombre es debido a la imagen de San Martin que se aprecia esculpida en el tímpano. Del siglo XII, consta de dos arquivoltas en gradación que descansan sobre dos columnas coronadas por capiteles, la arquivolta más externa tiene una moldura a modo de guardapolvo. En el tímpano la representación de carácter hagiográfico de la calidad de San Martín, vestido con túnica corta y montando a caballo, mientras que con la mano izquierda mantiene uno de los extremos de la capa, con la derecha sujeta una espada con la que la parte para darle su mitad a un pobre. Ese tema es muy original dentro de la escultura románica catalana, ya que se conservan muy pocas representaciones.
En el interior del templo llaman la atención los grandes vitrales que aportan luz al interior, están diseñados por Colí de Maraia en 1413. Los motivos son representaciones de la vida de Jesús, al igual que las claves de la bóveda.
Presenta planta de cruz latina con tres naves, con capillas entre los contrafuertes. En los brazos del crucero hay tres capillas a cada lado y en el deambulatorio que rodea el presbiterio se abren ocho capillas radiales. La cubierta, de bóveda de crucería y estrellada en los extremos de los transeptos y el deambulatorio, está soportada por diez pilares con columnas adosadas y capiteles decorados con motivos florales. En el extremo del brazo norte del crucero se levanta la torre del campanario.
La torre del campanario se levanta entre la casa de la Paeria y el templo. Se trata de una construcción de planta octogonal con grandes aperturas góticas que se construyeron en los siglos XIV y XV, en el mismo estilo que en la Seu de Lérida y el de Santa Maria de Balaguer. Cada campana, que en total son seis tiene un nombre y un sonido diferente.
La más antigua de ellas es "la Cordura Mayor" se accede por una escalera de caracol que lleva hasta la parte superior.
El altar mayor está presidido por la imagen de la Virgen del Coll de las Sabinas, patrona de la ciudad. Se trata de una escultura románica del siglo XIII, tallada en madera, presenta a la Virgen sentada sobre un trono y con el Niño en su rodilla izquierda.
A la derecha del crucero se encuentra la capilla del Santísimo Misterio, construida en 1633. De estilo barroco y realizado por Jaume Padró en el siglo XVIII. El oratorio guarda en su relicario una astilla de la cruz.
En la capilla de Santiago se encuentra el sepulcro historiado de Berenguer de Castelltort. En el relieve central dos ángeles presentan a la Virgen el alma del difunto.
En la capilla de Nuestra Señora de Montserrat se encuentra el sepulcro historiado de Ramón Serra, realizado por el escultor Jorge de Dios, que trabajó en Cervera entre los años 1379 y 1382. La urna funeraria tiene escudos hablantes y en la parte central hay un relieve del fallecido ante la Virgen. Sobre la cubierta hay una estatua yacente y al fondo, una multitud de figuras representando la escena.
El retablo de San Andrés es el único que se salvó de la Guerra Civil. En el se representan escenas de la vida del santo.
En una de las capillas de la nave de lado derecho encontramos la magnífica pila bautismal gótica que se atribuye al maestro Jacques, construida en 1568. Decorada con relieves florales y sostenida por tres atlantes. Cuatro caras representan los cuatro ríos más importantes del planeta en ese momento. En la parte superior cuatro evangelistas muestran, simbólicamente, que la palabra divina transforma el agua divina en fuente de purificación. Detrás hay esculpida una imagen de Santa Tecla.
La iglesia fue declarada el 3 de junio de 1931 Bien de Interés Cultural del Patrimonio histórico de España.