Santuario de Loyola

El Santuario de Loyola también conocido como la Basílica de Loyola, es un conjunto monumental y religioso, construido alrededor de la casa natal de San Ignacio de Loyola se encuentra ubicado a orillas del río Urola, en la población de Azpeitia, en el barrio de Loyola. 

Comenzó su construcción en  el año 1688 finalizando en 1888, siendo los encargados de su construcción José de la Incera, Jean Begrand, Martín de Zaldua, Sebastián de Lecuona e Ignacio de Ibero, Joaquín de Churriguera.

Ignacio de Loyola fue el fundador de la Compañía de Jesús conocida como los Jesuitas.

El Santuario de Loyola diseñado por Fontana, presenta una fachada de 150 metros de anchura, cuenta con una iglesia que está recubierta de una gran cúpula asentada sobre un tambor y rematada por una linterna, está precedido por un pórtico de forma curva al cual se puede acceder mediante una gran escalinata. A los lados cuenta con aleros de planta rectangular. Las tres plantas que se superponen en este conjunto están dominadas por cuatro áticos, dos por cada ala. Además el Santuario de Loyola se encuentra completamente rodeado por hermosos y verdes jardines.

El gran pórtico curvo está presidido por el escudo de los Borbones, ya que Loyola tenía el título de Real Colegio, fundado por Doña Mariana de Austria, pero el pórtico se construyó cuando en España la Casa de Austria había sido ya sustituida por la casa de Borbón.

En el interior, la iglesia sorprende desde el primer momento por la exuberancia barroca de su ornamentación churrigueresca en mármol labrado, con abundancia de dorados. El templo tiene un diámetro interno de 33 metros. Todo él está cubierto por un pavimento de sillares de mármol, que con sus colores gris paloma y rosa duquesa forman un espléndido mosaico concéntrico.

Es uno de los santuarios más importantes de la comunidad autónoma del País Vasco.