background-theme

Farmacia Juanse

Farmacia Juanse es una joya del barrio de Malasaña, fue fundada en 1892, los carteles son de finales del XIX ubicada entre la calle San Andrés San Vicente Ferrer

farmacia juanse  (12).jpg

La conocida Farmacia Juanse, en la esquina de la calle San Andrés con San Vicente Ferrer es una joya del barrio de Malasaña,  antiguo Barrio de Maravillas de Madrid. A parte de ser una magnífica farmacia y preciosa por dentro tiene la decoración y arte urbano del siglo XIX.

 Fundada en 1892, destaca por su fachada que mantiene  los azulejos originales de los años veinte, en los que se anuncian remedios milagrosos  propios de su laboratorio. En esa época surge la publicidad en los medios de comunicación y los comercios aprovechan para contactar con las escuelas de azulejos más importantes para encargar sus portadas a dos de los azulejeros que más destacan en ese momento, Marcelino Domingo y Enrique Guijo, creando escenas con lo que se vende en el interior con azulejos únicos, con  un estilo irónico que no se puede contemplar  en ningún otro sitio. Los carteles son de finales del siglo XIX junto a todo el conjunto artístico.

Su decoración exterior es lo más sobresaliente, ocupando media calle llena de azulejos como mosaicos publicitando sus productos, sobre todo la manera de anunciarlos.

En la Farmacia Juanse se podían encontrar Aguas Minerales, Medicamentos Puros, Óvulos, Vacunas y Sueros. También remedios para el dolor de muelas como el “Odontológico Juanseca” que aparece en un azulejo con una dama representando a la alta sociedad, que era la que en ese momento se lo podía permitir. Para la diarrea “Diarretil Juanse” con un precio de 40 céntimos reflejado en un niño de origen humilde abrazando a su madre con un orinal,  “Jarabe Balsámico Juanse” para bronquitis, catarros, asma, gripe, tos convulsiva, etc. Para los dolores de espalda y extremidades “Embrocación Juanse” una cataplasma. Todos anunciados en su fachada y registrados en Sanidad.

Hay dos azulejos con imágenes de lugares exóticos como China o la India, tema de gran interés en esa época, como para evadirte de los problemas cercanos…

Los azulejos fueron tapados durante los años de la posguerra, de esta forma se evitaba el pago de un impuesto que gravaba en esa época los anuncios publicitarios.  Actualmente los azulejos aún mantienen su esplendor a pesar de las agresiones constantes de gamberros, sobre todo pintadas.

En el interior tenemos un espacio bastante pequeño para el cliente y un espacio bastante más grande para el almacén de productos y el boticario. Hay una reja que separa los dos espacios de arriba abajo.

Antiguamente, las farmacias no tenían nada que ver con las actuales, eran como boticas con sus fórmulas magistrales, anunciando cada una de las propiedades de los productos. Más tarde se ha avanzado hacia las especialidades farmacéuticas elaboradas y registradas por las propias farmacias. Tanto la forma de venta como la publicidad han evolucionado mucho desde entonces.

Lamentablemente en la actualidad se encuentra cerrada al público y no sabemos cuál será su futuro, pero parece incierto.

 

Geolocalización:

© Colaboradores de OpenStreetMap
Ver en google maps